“FOMENTO A LA LECTURA EN PREPARATORIA”

Es un hecho irrefutable que los niveles de lectura en grados escolares de preparatoria a nivel nacional, y particularmente a nivel Michoacán, son muy bajos. Según estadísticas de la Encuesta Nacional de Lectura, realizada por CONACULTA en el año 2005, el promedio de libros leídos al año en México es de 2.9, el mayor porcentaje de personas que leen lo representan los jóvenes de entre 18 y 22 años de edad, es decir, los universitarios que leen por demanda escolar. Esto se comprueba en las mismas estadísticas que indican que el 24.6 % lee para informarse y otro 20% lee específicamente por razones escolares, dejando sólo un 9% que lee por placer. Cuatro de cada diez mexicanos de 12 años y más declaran nunca haber entrado a una librería. La falta de lectores tan inminente entre jóvenes entre los 16 y los 20 años, bien pudiera deberse, por un lado a la falta de hábito y de interés tanto de padres como de maestros; así como a programas de estudio enfocados a la historia de la literatura y que no perfilan dentro de sus objetivos el fomento a la lectura. Entendamos fomento a la lectura como el estímulo de alguna actividad con miras a desarrollarla y a crear interés en torno a ella. En el caso de la lectura, implica su impulso para el desarrollo de su comprensión, disfrute y provecho; requiere generalmente un guía o algún tipo de empuje, a veces de índole escolar, que sepa despertar interés e impulsar su aprehensión e interpretación mediante estrategias comunicativas diversas. Generalmente este tipo de fomento se explota en niveles preescolares, de primaria y muy poco en secundaria. Es por esto que el enfoque principal de este trabajo es el nivel de preparatoria, pues, por un lado, es en esta etapa donde los estudios de literatura y de lengua toman un carácter más serio y más específico. Esto se demuestra al reflexionar en el número de materias que de una u otra manera están relacionadas con la literatura en comparación con la escuela secundaria: Literatura Mexicana, Literatura Universal, Gramática Española, Lectura y Redacción, etc. Por otro lado, es justo en esta etapa en la que detienen su interés los programas de estímulo a la lectura, cuando las más de las veces, es donde más se necesita